Llegará en Italia en un vuelo Delta desde Nueva York. El hombre se llama Salvatore Mancuso Gómez, hijo de un italiano de Sapri que emigró a Colombia. Un nombre que ha sembrado el terror en Colombia durante las últimas décadas.

Salvatore Mancuso, fue jefe de las llamadas Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), unidades paramilitares de la extrema derecha, armadas y financiadas para combatir las guerrillas de las Farc y Eln, apoyadas abiertamente por la CIA y los gobiernos de Bogotá y en estrecha vinculación con los cárteles del narcotráfico.

Mancuso es expulsado de Estados Unidos, donde cumplió una larga pena de prisión por tráfico de drogas en la prisión de Atlanta, y será trasladado a Italia.

La noticia fue dada por el diario El Tiempo de Bogotá. El diario, citando fuentes cercanas a el abogado de Mancuso, Joaquín Pérez, escribe que: "un juez federal estadounidense aceptó los argumentos de la defensa del excomandante, que es hijo de un emigrante italiano, y ordenó su deportación a Italia".

Durante la audiencia, informa El Tiempo, “se le preguntó a una fiscal, April Denis Seabrook, si representaba al gobierno de Estados Unidos. Ella dijo que sí y agregó que estaba comprometida con el traslado de Mancuso a Italia antes del 4 de septiembre”.

El abogado de Mancuso confirmó el deseo de su cliente de ser enviado a Italia. En la audiencia, el juez pidió ser informado del lugar donde Mancuso, una vez libre en Italia, observará la cuarentena vinculada a la pandemia.

En estos días, dice El Tiempo, el exlíder de las AUC será trasladado a Nueva York desde donde, según fuentes federales estadounidenses, parte un vuelo Delta, operado por Alitalia, hacia Roma. De ser efectivo, el traslado de Mancuso a Italia y no a Colombia se debería a errores de procedimiento cometidos en el pasado por las autoridades colombianas en la solicitud de extradición.

El Ministerio de Justicia y la Fiscalía de Bogotá han solicitado que Mancuso "comparezca ante la jurisdicción colombiana, con el fin de garantizar el logro de la verdad, la reparación que merecen las víctimas de los crímenes que se le atribuyen". La solicitud fue presentada el pasado 15 de abril.

Salvatore Mancuso era el número dos de Fidel Castaño, quien junto a su hermano Carlos había formado las AUC (Autodefensas Unidas de Colombia), un ejército privado de ricos y terratenientes activos en las zonas de Córdoba y Urabá.

Para financiar su milicia, Fidel y Carlos Castaño explotaron a viejos conocidos a través de narcotraficantes, incluido Pablo Escobar y luego sus competidores.

Según algunas fuentes, Salvatore Mancuso, desde 1996 era el responsable de la producción de cocaína en la zona de Córdoba. Ocho años después, producía 1300 toneladas de pasta de cocaína al año, solo 1000, según el propio Mancuso.

El propio Mancuso confesó su participación en la matanza de casi 300 civiles en Colombia. También es impugnado como jefe de las AUC por diversas masacres, entre ellas: la masacre de Mapiripán (en la que murieron 27 campesinos), la masacre de El Aro (en la que fueron asesinados 15 campesinos, presuntos guerrilleros, por lo que fue condenado a 40 años de prisión, nunca concedidos por unirse a la Ley de Justicia y Paz), la masacre de Gabarra en 1999 donde murieron 35 civiles, y la notoria masacre de la vereda El Salado, la "en la que solo sobrevivieron perros".

El hombre está acusado de 588 asesinatos y 136 masacres en Colombia, tanto durante la fase de contrainsurgencia anti guerrilla como en la fase del narcotráfico.

Pero el líder paramilitar y narcotraficante Salvatore Mancuso tiene algunos problemas pendientes también en Italia por sus actividades en las que también participa la 'Ndrangheta.

Mancuso está involucrado en la Operación “Despegue” que condujo a la detención de 159 personas, incluidos los jefes de las N'drine Natale Scali (de Gioiosa Jonica) y Santo Scipione (de San Luca). Mancuso habría enviado 8 toneladas de cocaína desde Colombia al puerto de Gioia Tauro, en la región italiana de Calabria.

En definitiva, un personaje de tonos oscuros desde todos los puntos de vista. Y llegará en avión, no en un barco desde el Mediterraneo.