El sargazo es una macroalga que proviene básicamente de dos lugares: el Mar de Sargazo, cercano a las Islas Bermudas y del norte de Ecuador. Estas algas se acumulan frente a las costas de Brasil y debido a las corrientes marinas entran al Mar Caribe.

Se puede considerar al sargazo como una plaga que desbalancea el ecosistema del Caribe. El sargazo crece rápidamente. Al alimentarse de todos los residuos orgánicos que recoge durante su viaje, esto hace que su biomasa se duplique cada 18 días. Con es crecimiento, no alcanza a ser consumida y afecta el equilibrio ecológico.

Problemas a la industria turística

Nadie quiere ir a una playa que ya no es azul turquesa y que aparte de esto tiene un mal olor. El sargazo que llega a las playas se empieza a descomponer por su exposición al sol emitiendo gases de sulfuro de hidrógeno que causan este mal olor.

También tiene impacto en las comunidades que viven de la pesca, pues los pescadores tienen que pasar las acumulaciones de sargazo con el riesgo de enredarse con esta alga. Además, las partículas sueltas de sargazo pueden afectar a los motores de sus embarcaciones.

El sargazo es alimento para diversas plantas de las playas como lo es para aves, pero esto en cantidades regulares y no en las cantidades que están llegando a las costas de todo el Caribe.

Y aunque no causa daño a la salud, nadie quiere ir a una playa café y con mal olor.

La incertidumbre del sargazo

Al ser un fenómeno de cierta manera “nuevo”, la información que se tiene y las investigaciones que se han hecho no nos dan un claro resultado de como atacar este problema. Seguramente este fenómeno es parte del calentamiento global al no haber estado presente en años anteriores.

Es complicado elaborar un plan de ataque para eliminar de raíz el sargazo que afecta a las costas del Caribe Mexicano, pero hay una realidad ahora. No sabemos cuánto sargazo llegará el próximo año, pero el año actual tenemos y mucho.

Presupuesto y planes del gobierno estatal y federal

El tema de que el principal “pistón” de la industria turística mexicana se esté ahogando, concierne a todos. Es el principal ingreso del estado de Quintana Roo y una de las grandes puertas a nuestro turismo. Se puede decir que, sin Cancún, el tren maya turístico también pudiera sucumbir ante el sargazo.

El sector privado también debe de estar involucrado en este retiro de sargazo de las playas de Quintana Roo. Pero ¿cómo ponerse de acuerdo para acabar con esta “plaga”?

Al no haber costos reales, es difícil tener un presupuesto para desarrollar un plan de ataque. Según información que leí en la columna de Paola Rojas, un hotel gastó dos millones de pesos en un año para limpiar 600 metros de litoral. Un municipio pagó 30 millones en un año para limpiar 1.8 kilómetros.

La Semarnat y el gobierno de Quintana Roo estiman que se necesitan alrededor de 720 millones de pesos para resolver la problemática del sargazo. El problema, como dice Rojas, es la aplicación de los recursos gubernamentales para lograr controlar el problema. Se pueden aplicar bien o caer en la corrupción. Complicado el asunto pues nadie tiene una manera de atacar a este problema ecológico.

El negocio del sargazo

Una muy buena idea de negocio sería poder implementar ciencia y tecnología para recoger el exceso de sargazo desde antes que llegue a las playas. Ya se están diseñando barreras para contener el sargazo excesivo y barcos “sargaceros” para recoger esta alga. Lo importante es lo que sigue.

El sargazo se puede usar como fuente de biocombustible, como fertilizante, como fibras para fabricar utensilios de cocina y hasta como material para hacer durmientes útiles para el tren maya.

Dicen los gringos que, si te llegan limones, hay que hacer limonada. Si te llega sargazo, ¿qué se puede hacer? El negocio de la utilización del sargazo es incierto pues no se sabe su temporalidad, pero mientras que se analiza y se puede hacer una buena planeación habría que pensar qué hacer con el sargazo que se tiene.

Ese presupuesto de 720 millones de pesos para retirar el sargazo puede tener un pequeño o gran retorno de inversión si el sargazo recolectado se usa como materia prima para otro tipo de productos, ¿no cree?