Después de brillar en el futbol italiano, a los 23 años, Antonio Cassano jugó con el Real Madrid, pero distraído fuera de la cancha no pudo triunfar, y terminó peleando por una propina en Nueva York.
Antonio Cassano, exjugador del Real Madrid, donde estuvo de 2005 a 2007 y participó en 29 partidos con cuatro goles en su cuenta, lució más por su actividad nocturna en la capital de España.
Antonio Cassano y su falta de disciplina en el futbol
Es común que los grandes futbolistas no sean los más disciplinados, y Antonio Cassano, ex jugador del Real Madrid era uno de ellos.
A Cassano se le veía con frecuencia de fiesta nocturna, sin cuidarse y con un sobrepeso que hasta parecía normal en él. “Ni a Messi le vi hacer las cosas que hacía Antonio Cassano”, dijo su excompañero en la Roma, Leandro Cufré.
En Madrid, el exjugador del Real Madrid vivió en un hotel, donde contó que tenía un amigo camarero, quien le llevaba “tres o cuatro croissants tras haber hecho el amor. Me los llevaba a la escalera, yo acompañaba a la chica y hacíamos el cambio”.
Jugó en la Roma tras debutar en el Bari, después fue al Madrid y deambuló con Sampdoria, AC Milan, Inter, Parma y Hellas Verona. Seleccionado italiano en Eurocopa y un Mundial, se retiró a los 36 años.
El exjugador del Real Madrid terminó peleando por una propina en Nueva York
Alejado del futbol, el exjugador del Real Madrid, Antonio Cassano, contó en un podcast que en una visita a Nueva York con su familia, terminó peleando por la propina en un restaurante.
Relató que acudió a comer a un restaurante en Nueva York, donde pidieron aperitivos para los cuatro (él, su mujer y sus dos hijos) y una pizza. En total, 475 dólares, y el problema llegó al momento de pagar.
El exjugador pagó 500 dólares, pero el mesero le dijo que la propina era de 20 por ciento, lo que hizo pelear a Cassano, “si les doy 25 dólares en Italia se suben a las mesas y te lavan el coche. Pensaba que estarían contentos”, recordó.
Al final, tras pelear por la propina, el exjugador del Real Madrid se fue del restaurante de Nueva York sin dejar ni un solo dólar.