Los Juegos Olímpicos son el evento deportivo más importante del mundo, donde se reúnen miles de atletas de todo el mundo para rendirle honor a los dios griegos.
Los Juegos Olímpicos modernos están llenos de simbolismos, pero no cabe duda de que el ícono más importante son los Anillos o Aros Olímpicos, ¿pero qué significan?
¿Quién inventó los Anillos Olímpicos?
Los Anillos Olímpicos forman parte de la Bandera Olímpica, la cual fue creada por Pierre de Coubertin en 1913, para el Congreso Olímpico de París en 1914, donde utilizó la primera vez.
Pierre de Coubertin, fundador de los Juegos Olímpicos Modernos, diseñó la Bandera y los Aros Olímpicos inspirado en la ‘Union des sociétés françaises de sports athlétiques’.
En español, la ‘Unión de Sociedades de Deportes Atléticos franceses’, cuyo símbolo son dos aros entrelazados, uno rojo y otro amarillo, con el fondo blanco.
La teoría más popular es que los Aros Olímpicos representan la unión de los cinco continentes; todas las banderas de los países del mundo tienen al menos uno de los seis colores de la Bandera Olímpica.
Otros símbolos de los Juegos Olímpicos
La Bandera y los Anillos Olímpicos son el símbolo más importante de los Juegos Olímpicos, pero no los únicos; existen varios más.
Uno de ellos es el Himno Olímpico, pieza musical compuesta por el compositor griego, Spyridion Samaras, con palabras de un poema del griego Kostis Palamas.
Se cantó por primera vez el 25 de marzo de 1896 en la ceremonia inaugural de la primera edición de los Juegos Olímpicos de Atenas.
La letra ha sido traducida a diferentes idiomas, incluido al español y también con una adaptación para América Latina.
Espíritu inmortal, el Padre de pura
belleza, el grande y el verdadero
descenso, la revelación y mostró aquí
la gloria de la tierra y el cielo.
¡Dar vida y vivacidad a esos nobles juegos!
Lanzar coronas de laureles inmarchitables.
¡A los vencedores en la carrera y en la lucha!
¡Crea en nuestros pechos, corazones de acero! (bis)
En los campos, montañas y mares brillan con ustedes
en un matiz rosa y forman un gran templo
donde todos los países se reúnen para adorarte, (bis)
¡Oh espíritu inmortal de las Olimpiadas! (bis)
Himno Olímpico versión para América Latina.
Otro de los símbolos más importantes es la Juramento Olímpico, escrito por Pierre de Coubertin, y utilizado por primera vez en los Juegos de Amberes en 1920.
La Llama Olímpica es, junto con la Bandera y Aros Olímpicos, el símbolo más reconocible de los Juegos Olímpicos.
La Llama Olímpica conmemora la hazaña relatada en uno de los mitos de Prometeo, quien robó el fuego de los dioses griegos y lo entregó a la humanidad.
Durante los Juegos Olímpicos de la Antigüedad, el fuego se mantenía ardiendo en las sedes de celebración de las respectivas disciplinas.
Fue recuperado para los Juegos Olímpicos de Ámsterdam en 1928 y, desde entonces, ha sido parte fundamental de los Juegos Olímpicos Modernos.