Taylor Swift -33 años- ha estado regrabando sus álbumes después de que su antigua disquera vendiera su música sin su consentimiento; sin embargo esto provocaría un cambio en los contratos de artistas.
De acuerdo con Billboard, el éxito que Taylor Swift ha tenido con sus regrabaciones ha alertado a las compañías disqueras.
La situación de Taylor Swift y la regrabación de su música ha obligado a que las disqueras revisen y modifiquen los futuros contratos para los nuevos artistas que firmen con ellos.
Aparentemente, los principales sellos discográficos como Universal Music Group, Sony Music Entertainment y Warner Music, han estado revisando sus contratos con nuevos artistas.
¿Cuál sería el cambio que las regrabaciones de Taylor Swift provocarían en las disqueras y sus contratos?
Tal y como revela Billboard, el éxito de Taylor Swift con sus regrabaciones de su antigua música ha sido abrumador para la industria musical.
Por lo que el fenómeno que ha causado Taylor Swift con regrabar sus canciones para que su música vuelva a pertenecerle, ha hecho que las disqueras modifiquen sus contratos.
De acuerdo con el informe de billboard, las disqueras colocarían una cláusula que obligaría a los nuevos artistas firmantes a esperar de 10 a 30 años para regrabar su música, todo por el fenómeno de Taylor Swift.
Anteriormente, los contratos estipulaban que los artistas como Taylor Swift, podían regrabar su música después de esperar dos periodos:
- Esperar a que pasaran de 5 a 7 años desde el lanzamiento de su disco original para regrabar su música
- Dos años después de la expiración del contrato
¿Por qué Taylor Swift está regrabando sus discos?
Los estudios de grabaciones se encuentran revisando sus contratos después de las regrabaciones de Taylor Swift y el éxito que ha obtenido con ellas.
Y es que en 2019 fue cuando Taylor Swift anunció que regrabaría sus 6 primeros discos tras la compra del catálogo musical de la cantante a manos del manager Scooter Braun.
Sin posibilidad de negociar su música, Taylor Swift aprovechó esa brecha en su contrato para poder regrabar su música siendo ella la compositora de todas sus obras.
Aunque de acuerdo con UMG, las cláusulas en los contratos para regrabaciones de mas de 10 años, ya se había hecho antes del éxito de Taylor Swift, según revela también un artículo del Wall Street Journal.