Peso Pluma es el cantante del momento, el máximo exponente de los corridos tumbados y esto no le gusta a los fans de Natanael Cano, quien aparentemente pasó a ser la sombra del cantante originario de Zapopan, Jalisco.

Esto inevitablemente está incomodando a los seguidores de Natanael Cano, de 22 años de edad, quien en los últimos días ha sido visto con mal semblante, por lo que ya se creó una enemistad entre él y Peso Pluma, la cual no existe.

Peso Pluma y Natanael Cano echaron por tierra la supuesta rivalidad al aparecer juntos en el concierto que ‘Doble P’ ofreció en Hermosillo, Sonora.

Natanael Cano / Peso Pluma

Natanael Cano y Peso Pluma comparten escenario

Natanael Cano, el creador de los corridos tumbados, y Peso Pluma, el máximo exponente del género, aparecieron juntos en el Palenque de la Expongan, en Hermosillo, Sonora, donde interpretaron dos corridos bélicos.

Así como le sacaron brillo al escenario realizando sus famosos pasitos. El momento quedó registrado en video:

Para dejar claro que entre ellos no existe una mala relación sino todo lo contrario, la dupla de cantante brindó y se fundió en un abrazo arriba del escenario.

Peso Pluma y Natanael Cano

Más tarde Peso Pluma publicó en su cuenta de Instagram una fotografía junto a Natanael Cano: “Ayer demostramos que unidos somos imparables. Agradecimiento total a mis amigos que asistieron”, citó, por lo que las reacciones no se hicieron esperar.

“Eso es todo, carnal. Puras bendiciones”, “Se prendió el cerro”, “Los Beatles mexicanos”, “Si se juntaran llenarían 10 veces más”, “Como los amo”, “Pura lumbre”, “Los reyes con los dioses”, “Y la queso”, “Qué pinche orgullo ser mexicano”, “La unión hace la fuerza”, expresan entre comentarios.

Natanael Cano y Peso Pluma

Junior H se une a Natanael Cano y Peso Pluma

Natanael Cano no fue el único invitado de honor de Peso Pluma, el joven cantante también invitó a Junior H, otro popular cantante de los corridos tumbados.

‘Doble P’ y Junior H, de 23 años de edad, interpretaron la canción “El azul” y el público no paraba de gritar y aplaudir.