El atole de cempasúchil es una tradición dulce y ancestral en Michoacán, especialmente preparado durante la Noche de Muertos, según compartió el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla.

Este atole se elabora con la emblemática flor de cempasúchil, que no sólo adorna los panteones, sino que también es un ingrediente clave en esta bebida centenaria.

El atole de cempasúchil refleja la riqueza cultural y gastronómica de Michoacán, conocida por su variedad de sabores que atraen a visitantes.

Principalmente, es preparado por cocineras tradicionales que mantienen recetas ancestrales como María Elena Reyes Remigio, de Cocucho, municipio de Charapan, en la Meseta Purépecha.

Receta tradicional del atole de cempasúchil

Para preparar el atole de cempasúchil se combinan:

  • La flor de cempasúchil.
  • Harina de maíz.
  • Agua.
  • Leche.
  • Piloncillo.
  • Canela.

Esta mezcla se cocina en ollas de barro, que aportan un sabor distintivo, según la cocinera María Elena.

Esta aprendió desde su niñez la receta de sus abuelas, quienes también le inculcaron el amor por la cocina y la creatividad en los ingredientes.

En Michoacán, los municipios que destacan en el cultivo de cempasúchil son La Piedad, Tarímbaro, Copándaro y Zitácuaro, con más de 200 hectáreas dedicadas a esta flor.