Un hombre murió en el estado de Puebla, luego de que se atragantara con una memela en el municipio de Tehuacán, en el estado de Puebla.
Los hechos tuvieron lugar el viernes 5 de julio, en un puesto de comida ubicado sobre la calle Doctor Manuel Pereyra, en la colonia Ignacio Zaragoza.
Ante este tipo de situaciones es importante saber actuar, pues tener conocimiento en primeros auxilios podría salvar tu vida o la vida de otras personas.
Hombre muere tras atragantarse con memela en Puebla
Autoridades de Puebla dieron a conocer que el pasado viernes 5 de julio un hombre murió en el municipio de Tehuacán tras atragantarse con una memela.
Testigos que señalaron que esta persona se encontraba almorzando este platillo, cuando de pronto se desmayó ante la mirada de otros comensales.
Ante esta situación algunas personas se acercaron para auxiliarlo, además de que solicitaran una ambulancia a través de una llamada al 911.
No obstante, cuando los paramédicos arribaron al puesto certificaron que el hombre, identificado como Jesús, de 53 años de edad, ya no contaba con signos vitales.
Debido a esta situación se solicitó la presencia de la Fiscalía de Puebla, para proceder al levantamiento del cuerpo, y que fuera trasladado hasta el anfiteatro correspondiente.
Asimismo, agentes de la Policía estatal, así como de la Secretaría de Marina y Guardia Nacional, resguardaron la zona para permitir las labores de las autoridades.
Posteriormente, y luego de realizarse la autopsia correspondiente, se confirmó que el hombre de 53 años murió debido a que un pedazo de comida le obstruyó la tráquea, por lo que fue imposible el ingreso de oxígeno al cuerpo.
Primos auxilios podrían salvarte de atragantarte
Es importante que tengas conocimiento de primeros auxilios, puestos estos podrían salvarte o salvar la vida de alguien más en caso de atragantamiento.
Y es que ante caso de asfixia por comida o algún otro objeto, deberás aplicar la conocida maniobra de Heimlich.
Para ello, deberás realizar compresiones abdominales rápidas hacia arriba y hacia dentro, hasta que la persona expulse aquello que le impide respirar.
¿Cómo hacerlo? Pues bien, deberás abrazar a la persona por la espalda y por debajo de sus brazos. Además, colocar una de tus manos con el puño cerrado, entre cuatro o cinco dedos encima de su ombligo.
Tu otra mano deberá estar sobre tu puño, y posteriormente deberás hacer mucha presión en el puño hacia su abdomen.