El Cártel de Sinaloa financió a 13 empresas propiedad de dos supuestos prestanombres de Francisco García Cabeza de Vaca, gobernador de Tamaulipas.

Una investigación de Contralínea reveló que de acuerdo a un expediente de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), las empresas de los presuntos prestanombres de García Cabeza de Vaca están vinculadas al grupo de siete empresas fachada que el Cártel de Sinaloa usa para lavar dinero a su favor y al Cártel de Colombia.

¿Qué reveló la UIF sobre las empresas de los prestanombres de Francisco García Cabeza de Vaca?

De acuerdo con la UIF, 12 de las 13 empresas que habrían sido financiadas por el Cártel de Sinaloa pertenecen a Baltazar Higinio Reséndez Cantú, quien ha sido identificado como prestanombres del todavía gobernador Francisco García Cabeza de Vaca.

Aunado a lo anterior, dichas empresas también fueron usadas para obtener contratos millonarios del gobierno de Tamaulipas.

Asimismo, la UIF evidenció que una cantidad de los recursos obtenidos por las compañías fueron destinados al Cártel del Pacífico como parte de este esquema de lavado de dinero.

Baltazar Higinio Reséndez Cantú fue vinculado a proceso en julio de 2021, por los delitos de delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita.

Esto tras ser detenido una semana antes en Texas, Estados Unidos, y entregado a México a solicitud de la Fiscalía General de la República.

Es importante mencionar que además de los cargos en México, en Estados Unidos había sido identificado como probable responsable de lavado de dinero.

¿De quién es la empresa restante? La UIF indicó que tal empresa es propiedad de Juan Francisco Tamez Arellano, otro prestanombres de Francisco García Cabeza de Vaca.

Fue a través de dicha compañía que se realizó la compra-venta del departamento en Santa Fe, Cuajimalpa, Ciudad de México, por el que un juez giró una orden de aprehensión en contra del gobernador en mayo de 2021.

Y es que según la dependencia, mediante esa transacción se registraron ingresos directos a las cuentas bancarias de García Cabeza de Vaca ligados al Cártel de Sinaloa.

Dicha empresa fue una de las ocho que se involucró en la triangulación de los 40.3 millones de pesos que el Cártel de Sinaloa le pagó a García Cabeza de Vaca por el departamento.

De tal manera, la UIF señaló que las 13 compañías de los presuntos prestanombres de García Cabeza de Vaca interactuaron con el Cártel de Sinaloa mediante financiamiento de recursos y reintegración.

¿Cuáles fueron las empresas que más recibieron recursos para Francisco García Cabeza de Vaca?

De las 12 empresas a nombre de Baltazar Reséndez Cantú (uno de los prestanombres de Francisco García Cabeza de Vaca), las que más recursos habrían recibido fueron:

  • Inmobiliaria RC de Tamaulipas, SA de CV
  • Barca de Reynosa, SA de CV

De 2019 a 2021, Inmobiliaria RC envió 300 millones de pesos a Baltazar Reséndez Cantú.

Mientras que Barca de Reynosa recibió 497.4 millones de pesos de múltiples licitaciones con el gobierno de Tamaulipas, Pemex y Conagua.

Además, ambas empresas recibieron tres contratos vía licitación pública de parte de la Secretaría de Obras Públicas de Tamaulipas por una suma de 54.5 millones de pesos para:

  • la construcción del Centro de Justicia para las Mujeres en Reynosa
  • la construcción, mobiliario y equipo de la Unidad de Docencia para el estado de Tamaulipas
  • la pavimentación de la calle Cerro del Cubilete

Por su parte, el segundo prestanombres de García Cabeza de Vaca —Juan Francisco Tamez Arellano— fue identificado como accionista y representante legal de la empresa fachada T Seis Doce, SA de CV.

De tal manera que de marzo a abril de 2018, Reséndez Cantú le envió 33 millones de pesos a Tamez Arellano; y este a su vez le envió 2.4 millones de pesos a su empresa T Seis Doce, misma que adquirió el departamento de García Cabeza de Vaca en Santa Fe.

Cabe mencionar que la compra se concretó con recursos triangulados de las empresas fachada del Cártel de Sinaloa.

Finalmente, la empresa T Seis Doce envió a Francisco Cabeza de Vaca un monto por 36.8 millones de pesos, y después 5.3 millones adicionales.

La UIF sostuvo que tales recursos posiblemente fueron obtenidos de la venta del departamento en Santa Fe, CDMX.