El cubrebocas se ha convertido en una herramienta necesaria para el día a día de niñas, niños y adultos por igual, pero aún sabiendo que se trata de una medida de protección que no hace diferencias por género, una escuela en Canadá causó polémica cuando decidió hacer una diferenciación entre sus alumnas y sus alumnos al entregarles un par de mascarillas. 

Evidentemente es plausible que la institución repartiera los elementos de protección para asegurarse de que cada estudiante tuviera el suyo, pero una niña se molestó por considerar que es absurda la división del típico "rosa y azul" según el género, así lo contó su mamá en Twitter. 

La doctora Catherine Lebel, contó que su hija llegó "molesta" de la escuela porque las autoridades distribuyeron "cubrebocas de niñas" y "cubrebocas de niños"; los primeros eran rosas con estampados de besos y corazones, mientras los segundos eran de tela azul sin dibujos. 

Lebel resaltó que lo ocurrido realmente no le parece un problema mayor pues lo principal es que la escuela se preocupe por proteger al estudiantado, pero hizo énfasis en que deberían reforzarse los esfuerzos para evitar que los niños desarrollen estereotipos de género. 

La mamá también declaró que las "mascarillas son mascarillas" y debería poder ponérsela quien la necesite sin importar su género, y admitió que aunque no cree que la escuela haga algo para retractarse, lo ideal sería que esta clase de objetos se hicieran sin distinción.