Hay una fotografía que se destaca entre las muchas que ha tomado el Telescopio Espacial Hubble, de la NASA, y es la de los Pilares de la Creación.

Fue en 1995 cuando la icónica imagen reveló detalles nunca antes vistos de tres columnas majestuosas de gas frío bañadas por la luz ultravioleta de un grupo de estrellas jóvenes y masivas en una pequeña región de la Nebulosa del Águila.

Hasta ese momento no se había visto algo tan hermoso en el cielo. Los Pilares de la Creación están llenos de misteriosos detalles, por ejemplo:

  • La columna de la izquierda mide cuatro años luz de largo, en cuyo interior nacen las cientos de estrellas que forman el cúmulo NGC 6611.
  • Estas estrellas de los Pilares de la Creación “queman” el gas y el polvo de las nubes a través de reacciones de fusión nuclear.
Los Pilares de la Creación captados en 1995

Así, para celebrar su vigésimo quinto aniversario, en 2014 la NASA envió de nuevo al Telescopio Hubble a visitar las radiantes columnas, logrando una visión más nítida y amplia.

Esto hizo que en lugar de llamarlas los Pilares de la Creación, los astrónomos prefirieran llamarlas “Pilares de la Destrucción.

Lo que vemos tal vez ya no existe: Los Pilares de la Creación pudieron haber sido destruidos hace 6 mii años

La foto más reciente de los Pilares de la Creación, tomada con infrarrojo, permitió detectar lo que parecía ser un frente de choque generado por una supernova.

Esto indicaría, según el astrónomo Nicolas Flagey, que la onda del violento estallido habría destruido toda la nube de polvo de los Pilares de la Creación hace milenios.

Pero entonces, ¿cómo es que todavía podemos verlos? Resulta que la distancia entre ellos y la Tierra es tan grande, que la luz tardaría hasta 7 mil años en llegar.

Los Pilares de la Creación captados en 2014

Y, aunque otros astrónomos han sugerido que esta destrucción es más gradual, hasta ahora se cree que si ocurrió hace 6 mil años, todavía tenemos mil años para apreciar los Pilares de la Creación.

¿Es eso posible? Recordemos que la velocidad de la luz es de casi 300 mil kilómetros por segundo; es decir, tarda 8 minutos y 20 segundos en llegar a la Tierra.

Como ocurre con los Pilares de la Creación, los últimos rayos de luz del Sol son percibidos en la Tierra tal y como eran en sus últimos 8 minutos. Estamos viendo algo que ya no existe.

En todo caso, las fotos tomadas por los telescopios de la NASA son ya una reliquia de un pasado al que tal vez pudimos viajar.