¿Por qué no se pone altar de muertos para un recién fallecido? Te decimos las razones del porqué no debe tener ofrenda o estar en el altar, según la tradición del Día de Muertos.
Se aproxima el Día de Muertos 2024 y es por eso que incluso desde días antes se ha comenzado a celebrar la festividad.
Pero según la tradición de Día de Muertos, a los recién fallecidos no se les debe poner altar de muertos en la ofrenda pero ¿por qué? Aquí te explicamos.
Esta es la razón por la cual no se pone altar de muertos a un recién fallecido
El Día de Muertos 2024 está por llegar, y muchos ya están poniendo sus altares para recordar a sus seres queridos.
Sin embargo, de acuerdo con la tradición, no se debe colocar en el altar a las personas que recién murieron, pero ¿cuál es la razón?
La razón por la cual no se debe poner altar a un recién fallecido, radica en el respeto hacia la misma persona que murió.
Ya que al haber sido un recién fallecido, se considera que no tuvieron tiempo de “pedir permiso” para acudir a la celebración del Día de Muertos.
Esto aplica especialmente para quienes han muerto un mes o días antes del Día de Muertos, ya que también se dice que un alma necesita tiempo para tener descanso en el Mictlán.
De acuerdo con las creencias populares, el alma de un recién fallecido inicia un viaje largo y delicado hacia el Mictlán.
Por lo que se cree que durante el primer año de haber fallecido, no puede regresar para el Día de Muertos, en donde la espera simboliza el cierre de un ciclo.
¿Cuánto tiempo se debe esperar para poner a un recién fallecido en el altar de muertos?
Tal y como se ha revelado, la tradición ancestral de Día de Muertos tiene sus reglas y costumbres, siendo una de ellas el no poner a alguien en el altar si es recién fallecido.
Pues como ya se dijo, su viaje al Mictlán implica una travesía larga; aunque también se dice que es por que no alcanzan a “pedir permiso” para regresar.
Sin embargo, ¿cuánto tiempo después se debe esperar para colocar a un recién fallecido en el altar de muertos?
De acuerdo con la tradición, el tiempo recomendado para poner a un recién fallecido en el altar de muertos, debe ser al menos de un año desde su fecha de muerte.
Pasado este tiempo, ya se puede colocar al siguiente Día de Muertos a la persona que recién falleció, para que pueda disfrutar de los alimentos y bebidas que le gustaban en vida.
