Gracias a la tendencia de remakes y remasters por la que se caracterizó la actual generación de consolas, hemos conocido varias joyas que estaban perdidas en la historia de los videojuegos, tal es el caso de 'Mr. Driller Drill Land', el cual llega a Switch de la mano de Bandai-Namco.
El juego salió originalmente para GameCube; pero fue enterrado por títulos más famosos y por el fracaso de la consola. Ahora, esta nueva versión llega con el mismo nivel de diversión y algunos extras que mejoran la experiencia.
Sin olvidar que se mantiene como uno de los mejores títulos de puzzle de los últimos años, cambiando un poco la dinámica clásica, dando como resultado una obra que agradará a todo el fan del género, así como a quien busque un título para pasar un rato.
Como 'Tetris' pero al revés
Cuando decimos que 'Mr. Driller Drill Land' cambia las mecánicas de los puzzles tradicionales, nos referimos a un giro de 360º, literalmente. En lugar de desaparecer bloques o elementos manera ascendente, evitando que se llene la pantalla; aquí empezamos desde la parte de arriba de un nivel saturado.
Nuestra misión es llegar hasta el fondo excavando con ayuda de alguno de los personajes elegibles; podemos ir eliminando bloques de uno por uno o por secciones, gracias a los combos que se pueden generar al combinar varios del mismo tipo.
No obstante, debemos de estar atentos a todo lo que nos rodea, pues podemos ser atacados por enemigos, secciones del escenario se pueden desprender y atacarnos o nos podemos quedar si energía; por lo que una estrategia mal aplicada significará el fin de nuestra aventura.
Afortunadamente, si no eres un experto en este tipo de interactivos, existe un modo "casual" donde la dificultad baja dramáticamente. Esta opción puede ser criticada por los puristas, pues hasta cierto punto, le quita mucho del reto y de la diversión; no obstante, es perfecto por si apenas te estás adentrando al mundo de puzzle.
Muchas maneras de armar un rompecabezas
Si bien la campaña (si se le puede llamar así) es entretenida e incluso nos llega a dar intensas batallas en contra de jefes; el juego cuenta con varios modos que experimentan con los límites de los puzzle, ofreciendo un mayor reto a los fans.
Por ejemplo, The Hole of Druaga agrega combate a los escenarios, lo que lo acerca un poco a los juegos de acción; mientras que Horror Night House convierte al título en un survival horror, donde tenemos que escapar de una casa embrujada.
Y claro, tenemos el clásico modo multijugador local, donde pueden competir hasta 4 jugadores al mismo tiempo. En sí, todo se basa en sumar más a la experiencia de diversas maneras posibles, sin perder la esencia del juego.
Estética muy bien lograda
Desde su lanzamiento original, 'Mr. Driller Drill Land' no se caracterizó por ser un portento que llevara al extremo las consolas, y sigue sin serlo realmente; aún así, es de agradecer el trabajo que hizo Bandai-Namco con este remaster en cuestiones estéticas y de rendimiento.
El juego se ve muy bien y se adecua de manera perfecta a las pantallas modernas, así como a la del Nintendo Switch, cubriendo los espacios que dejaban las televisiones viejas con ilustraciones que van acorde a la temática.
Junto con esto, se mantiene el soundtrack, el cual ha sido catalogado como uno de los mejores de la época del GameCube, aunque se le han hecho algunos retoques para la nueva versión; nada que afecte las laureadas melodías.
Además, el juego prácticamente carece de pantallas de carga; toda la jugabilidad se da de manera fluida y sin cortes, algo que incluso en su versión original era difícil de lograr. La nuevas herramientas de desarrollo permiten que por fin tengamos una obra fluida.
Entretenimiento en su máximo esplendor
'Mr. Driller Drill Land' no es un juego de presupuestos abultados y temáticas profundas, es una obra lúdica en la acepción primigenia de la palabra; esto es, su única misión es que la gente pase un buen rato sin tantas complicaciones.
Con eso en mente, logra muy bien su objetivo, a pesar de ser un título de hace dos décadas. Su esencia está intacta, lo cual agradecerán los veteranos de la obra, mientras que los nuevos jugadores no sentirán que desentone con los títulos modernos del género.
Tal vez el único problema es que, incluso en los modos secundarios, la dinámica de juego no varía mucho realmente, por lo que puede ser repetitivo para alguien que desee un poco más de acción o no esté en todo con la obra.
Aún así, vale la pena darle una revisada, pues es perfecto para pasar el rato, tanto de manera solitaria, como con su multijugador local.