Se rompe la piedra que aprisionaba al Kyubi, zorro de 9 colas del mito japonés; esto lo reportó una turista que fue a visitar el lugar donde se encontraba el sello.

De acuerdo con “Lillian”, como se hace llamar en Twitter, fue a visitar Sessho-seki, la piedra que aprisionaba al Kyubi; cuando llegó se topó con la sorpresa que la roca estaba partida.

Esto le causó mucha impresión, al grado que hizo una referencia a ‘Naruto’ (anime y manga donde sale el Kyubi), señalando que si fuera un manga, sería señal de que el sello se rompió.

Sessho-seki, roca que aprisionaba al Kyubi

Vine solo a Sessho-seki, donde permanece la leyenda del zorro de nueve colas.

Es una gran roca envuelta en una cuerda.

Se suponía que debía de haber, pero la roca se partió por la mitad y la cuerda también se desprendió.

En un manga, sería una señal de que el sello está roto y el zorro de nueve colas fue liberado. Siento que he visto algo que no debería.

@Lily0727K

Sessho-seki es conocida en Japón por ser una roca maldita, de hecho recibe el sobrenombre de “piedra asesina”; supuestamente matará a todo aquél que la toque, por ello está apartada del camino.

Esta creencia, así como la leyenda del Kyubi, han hecho que Sessho-seki sea muy solicitada por turistas de todo el mundo, quienes la vistan todos los años.

Más allá del posible escape del Kyubi, autoridades creen que Sessho-seki se rompió por la edad y la erosión; sin embargo, ya se plantean el restaurarla para que siga atrayendo a los turistas.

¿Cuál es la leyenda de Sessho-seki? La piedra que aprisionaba al Kyubi

De acuerdo con la tradición japonesa, Sessho-seki es el cuerpo transformado de Tamamo-no-Mae, una hermosa mujer cuya verdadera identidad era el Kyubi, zorro de 9 colas.

El Kyubi tomó la forma de Tamamo-no-Mae por órdenes de un señor feudal para matar al Emperador Konoe; sin embargo, fracasó al descubrirse el engaño por el guerrero Miura-no-Suke, quien mató al demonio.

Tras su muerte, el cuerpo de Tamamo-no-Mae (Kyubi) se convirtió en Sessho-seki, la mencionada piedra; la cual mantuvo aprisionado al espíritu del demonio por varios años.

Tamamo-no-Mae

Esto hasta que el monje budista Genno pasó por el lugar; el Kyubi, en su forma de Tamamo-no-Mae, trató de tentarlo con el fin de que fuera liberado del encierro.

Genno descubrió el engaño del Kyubi y procedió a exorcizar a Sessho-seki, pidiendo por la salvación del demonio; Tamamo-no-Mae prometió que no regresaría y dispersando su esencia por todo Japón.

Supuestamente todo esto sucedió hace mil años, desde entonces Sessho-seki, el Kyubi y su forma de Tamamo-no-Mae habían descansado en Japón hasta la ruptura del sello.

Con información de Twitter.