Suicide Squad: Kill the Justice League empezó como la gran promesa de traer de regreso el universo de Batman Arkham, saga de videojuegos muy querida hasta el día de hoy.
Sin embargo poco a poco la emoción por Suicide Squad: Kill the Justice League se desvaneció cada que se anunciaban nuevos detalles del juego.
Su aspecto siempre online, microtransacciones agresivas, continuación del Arkhamverso, lanzamiento lleno de bugs, entre muchas otras cosas le han dado una pésima fama.
Lo irónico de todo es que el juego en sí mismo no es malo, Rocksteady trató de entregar un buen producto; pero todo lo que se creó a su alrededor termino por mancharlo.
Al grado que lo que pudo ser algo brillante, termino por convertirse en una obra genérica y olvidable.
¿De qué trata Suicide Squad: Kill the Justice League?
Dígamoslo de una vez, si eres fan a muerte de DC (cómics, juegos, películas, series, etcétera) o de la saga Batman Arkham, la historia de Suicide Squad: Kill the Justice League no te acabará de gustar.
Esto debido a que los guionistas detrás de Suicide Squad: Kill the Justice League no parecen entender muy bien los elementos esenciales de los personajes de DC y del mundo del Arkhamverso.
Hay muchas cosas te causarán ruido y te sacarán de inmediato del juego, contradiciendo a su propio universo una y otra vez con argumentos que te parecerán excusas.
Por poner un ejemplo sin spoilers; el juego no entiende cómo funciona el anillo de Linterna Verde.
Sin embargo, si eres un jugador más relajado, que sólo conoce lo normal de DC y sus personajes, Suicide Squad: Kill the Justice League te dará una historia interesante y divertida.
En Suicide Squad: Kill the Justice League, Amanda Waller “recluta” a Deadshoot, King Shark, Capitán Boomerang y Harley Queen para infiltrarse en una Metropolis conquistada por Brainiac.
Sin embargo, tras una serie de eventos y enterarse que casi toda la Liga de la Justicia está bajo el control del villano, su nueva misión será salvar el mundo matando al equipo de héroes.
Esta trama se sostiene principalmente gracias a los 4 protagonistas, quienes cuentan con un gran carisma, lo que hará que te encariñes con ellos en poco tiempo.
Cada uno tiene sus propias motivaciones y personalidad, cosa que no impide que tengan buena química entre ellos y con el resto del elenco.
Lamentablemente no es lo mismo del lado de los villanos; la Liga de la Justicia es intrascendente, quedándose como supervillanos estereotípicos, mientras que Brainiac apenas si aparece y cuando lo hace es olvidable.
¿Cómo se juega Suicide Squad: Kill the Justice League?
Suicide Squad: Kill the Justice League en esencia es un juego de disparos en tercera persona con elementos RPG, lo cuales a son innecesarios, a decir verdad.
Como título de acción, Suicide Squad: Kill the Justice League funciona muy bien; aunque no son tan diferentes, cada personaje tiene ciertas particularidades atractivas.
Lo cual te incita a jugar con todos para ver cuál te acomoda mejor, además de que en ciertas misiones el cambiar de protagonista te dará algunas bonificaciones.
A mencionar que este cambio de personaje se puede hacer muy fácil, sólo con presionar un botón para tener un nuevo líder en pantalla.
Puedes equiparlos con diferentes armas de fuego y cuerpo a cuerpo, además de mejorar sus estadísticas con un árbol de habilidades.
Sin embargo, a diferencia de la mayoría de juegos, este árbol es bastante limitado, pues es el mismo título el que elige qué rama tienes que mejorar.
Dichas mejoras tampoco son tan sustaciales, haciendo que todo dependa de agarrar un arma más grande y destructiva, más que de una estrategia bien planeada.
Una vez que pasamos a la acción, Suicide Squad: Kill the Justice League se vuelve un caós total; la pantalla se llena de “suciedad visual”, con explosiones, marcadores, destellos y demás saltando por todos lados.
Sí, es bastante invasivo y quienes sufran de mareos, algún padecimiento visual o neurológico la pasarán muy mal; si no es tu caso, te costará, pero al final te lograrás acostumbrar.
Hay que mencionar que en Suicide Squad: Kill the Justice League no sólo es disparar y ya; cada enemigo es diferente, lo que te permite hacer combinaciones de todo tipo.
Tienes ejecuciones, counters, movimientos especiales, armas con diversos efectos, granadas, y muchas otras cosas para que te pongas creativo a la hora de la verdad.
Si bien puedes explorar Metropolis relativamente a placer, la ciudad está totalmente vacía, no hay nada interesante que hacer salvo matar enemigos una y otra vez.
Hay desafios del Acertijo otra vez, pero no son nada del otro mundo; mientras que las misiones secundarias son repetitivas y génericas, de tipo proteger una zona o rescatar rehenes.
Las bonificaciones que te dan no son muy buenas en realidad, pues depende del azar si te dan o no una mejor arma.
Lo malo de todo esto es que eso es lo único que queda al terminar la historia, lo que nos da un contenido base irrelevante, por lo menos hasta que llegue la primera temporada.
Aún más, se supone que Suicide Squad: Kill the Justice League está hecho para jugar siempre online en cooperativo; pero la realidad es la experiencia no cambia mucho.
Puedes pasarte el título sin ayuda de otra persona, sólo con la inteligencia artificial, sin ningún problema; lo mismo aplica para el resto de contenido que se abre al finalizar la trama.
El reto no baja ni aumenta, no hay mejores recompensas ni interacciones únicas para requerir el modo multijugador en Suicide Squad: Kill the Justice League.
A menos que juegues con personas que ya conoces, pues sólo así cambia la dinámica, no por el juego en sí mismo, sino por la relación que tienes con amigos o familiares.
Si esa es tu intención, te podemos decir que fuera del desastre del lanzamiento, Suicide Squad: Kill the Justice League funciona bastante bien, nunca tuvimos problemas con los servidores o enfrentamos cuelgues masivos.
¿Cómo se ve Suicide Squad: Kill the Justice League?
Lo más destacable de Suicide Squad: Kill the Justice League es el aspecto gráfico.
Modelos y entornos de Suicide Squad: Kill the Justice League lucen muy bien; sobretodo hay que mencionar las expresiones faciales, que están hechas de manera casi perfecta.
Pero sí hay que mencionar algunos pequeños problemas que tuvimos o notamos al momento de jugar.
La obra sufre de baja en cuadros por segundo; curiosamente no en los momentos de acción, sino cuando vas explorando. Lo notas principalmente en tus compañeros si estás offline.
Esto se llegan a mover un poco más lento, lo mismo que las sombras. Es algo apenas perceptible; pero ahí está.
También hay algunos bugs menores, como que pequeños elementos del escenario se queden flotando tras una pelea intensa, como latas de refresco, por ejemplo.
Igual, apenas se nota, pero no se puede negar que se hizo presente en nuestra partida.
Lo que sí fue bastante evidente en Suicide Squad: Kill the Justice League fue un momento donde se comenzó a trabar, esto durante una cinemática.
Durante toda esa secuencia el juego se congeló varias veces; tras esto no volvió a suceder, pero si es indicio que le falta una pequeña pulida final a la obra.
Finalmente, el apartado sonoro es bueno, de hecho es lo único en lo que no tenemos quejas o apuntes.
Los efectos de sonido son excelentes, lo mismo que la música, la cual se adecúa perfectamente a la acción en pantalla.
Y claro las voces son de una calidad innegable, tanto en inglés como en español latino; actores y actrices están totalmente en tono con sus personajes.
¿Suicide Squad: Kill the Justice League vale la pena?
Suicide Squad: Kill the Justice League no es un juego que recomendemos en su actual estado.
Como título offline en realidad no es muy destacable; por muy buenos personajes e interesante que sea la historia, esta hace agua por varios lados, además que el juego se torna repetitivo en su gameplay en poco tiempo.
Mientras que el apartado online de Suicide Squad: Kill the Justice League es meramente anecdótico, sin nada que aporte realmente a la experiencia; lo cual es alarmante, pues se ha apostado todo a esto.
Como si fuera el mismo escuadrón, Warner Bros. Games mandó a la muerte a Rocksteady y los personajes, para ver si de milagro les salía la jugada. En este momento podemos decir que no ha sido así.