Igor Pavlovets, es el “bebé de Chernobyl” que sólo supo que creció en un hospital y poco sabe de la tragedia; te contamos su historia.
Se le llama “bebé de Chernobyl” o “los hijos de Chernobyl” a aquellos niños que nacieron tras el accidente nuclear, y que por ende, sufrieron malformaciones congénitas o enfermedades debido a la radiación.
Tal es el caso de Igor Pavlovets, quien nació el 3 de marzo de 1987 en Bielorrusia, a once meses del horror del accidente y sufrió las consecuencias de la radiación a la que sus padres se vieron expuestos.
Igor nació sólo con un brazo y sus piernas no terminaron de desarrollarse; el pequeño creció en un hospital ignorando toda la tragedia que había detrás de su historia.
Esta es la historia de Igor, el “bebé de Chernobyl” que sufrió las consecuencias del accidente
El pequeño bebé de Chernobyl siempre creyó que fue abandonado por su madre ya que se crió en un hospital ubicado a 60 kilómetros del reactor nuclear.
Pero la verdad es que los “hijos de Chernobyl” fueron retirados de sus madres y aislados por políticas de la Unión Soviética para así no dar de qué hablar ni alertar a la población.
Aunado a eso, el gobierno de Mijaíl Gorbachov ordenó internar a todos los niños nacidos con malformaciones físicas en un neuropsiquiátrico cuando éstos cumplieran la edad de 4 años.
Sin embargo, Igor no fue enviado al neuropsiquiátrico debido a que las enfermeras del hospital donde él creció, cambiaron sus papeles y fecha de nacimiento para impedir que fuera trasladado.
Fue así que Victor Mizzi, director de la fundación Chernobyl Children’s Lifeline, dio con el pequeño Igor, pues en su visita al hospital lo conoció y lo integró a su programa para darle tratamiento prostético.
A los 6 años, Igor fue trasladado al Reino Unido para recibir su tratamiento, y fue acogido por una pareja inglesa, con quienes vivió desde entonces y a quienes considera sus padres.
A pesar del tratamiento, Igor Pavlovets nunca se adaptó a su nuevo brazo, por lo que actualmente no lo usa.
“Lo sentía extraño. Le agradezco a la gente que trató de ayudarme, pero soy feliz con un solo brazo”.
Igor Pavlovets
Igor, el “bebé de Chernobyl”, no recuerda nada de su pasado; hoy tiene una familia
En 2016, Igor Pavlovets “el bebé de Chernobyl” dijo en entrevista a Express que no recuerda nada de sus primeros años de vida ni mucho menos del horror que se vivió tras el accidente nuclear.
No obstante, cuando tenía 12 años, su familia adoptiva lo instó a investigar sobre su pasado y fue así que contactó a su familia biológica, quienes vivían en Minsk.
Su madre biológica, Elena, le contó que ella nunca quiso abandonarlo y que fue obligada a darlo en adopción; nunca supo si él había logrado sobrevivir.
Se reencontró con su madre cuando Igor ya tenía 16 años y en dicho encuentro que se suscitó en su nuevo hogar en Inglaterra, también conoció a sus hermanos.
En 2019, a sus 32 años, Igor se casó con Alice, una enfermera psiquiátrica con quien tuvo dos hijos.
El “bebé de Chernobyl” dijo que nunca temió por dejar descendencia, ya que sabía que su situación fue debido a la radiación pero no sería una cuestión hereditaria.
En dado caso, tanto Igor como Alice asumieron que si alguno de sus bebés se hubiera desarrollado con problemas congénitos, ambos habrían aceptado continuar con los embarazos.
¿Qué pasó en Chernobyl? A 37 años del accidente nuclear
Un día como hoy, pero de hace 37 años, tuvo lugar el accidente nuclear de Chernobyl, al norte de Ucrania.
La madrugada del 26 de abril de 1986 explotó un reactor nuclear de la central ubicada en Chernobyl, cuya tragedia dejó más de 25 mil muertos e inundó la ciudad de grandes cantidades radioactivas.
Por ello, aquellos que sobrevivieron al accidente, o los bebés que nacieron en aquella época, sufrieron enfermedades, muertes prematuras y malformaciones debido a la exposición a los altos niveles de radiación.
Chernobyl se convirtió en un “pueblo fantasma” y la radiación en la zona es tan elevada que se convirtió en un lugar inhabitable.
Con información de BigBang!