Novatada que mató a 7 cadetes de la Guardia Nacional podría llevarse a un juicio civil en contra del mando militar que ya se encuentra detenido.

De acuerdo con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), se analiza la posibilidad de enviar el caso a la Fiscalía General de la República (FGR) para que dicha autoridad investigue el delito de homicidio culposo.

Fue el pasado 20 de febrero de 2024 cuando 7 cadetes de la Guardia Nacional murieron ahogados tras meterse al mar agitado en la Playa Corona, en Ensenada, Baja California, por ordenes de uno de los instructores al mando.

Novatada que mató a 7 cadetes de la Guardia Nacional podría tener juicio civil; Sedena enviaría caso a FGR

La Sedena, quien aun conserva el mando de la Guardia Nacional pese a instrucciones de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), se encuentra analizando la posibilidad de un juicio civil por la muerte de 7 cadetes.

La institución militar podría turnar la investigación a la FGR, para que sea esta autoridad quien defina la responsabilidad del mando que se encontraba a cargo de la instrucción.

Y es que este militar, de quien la Sedena no reveló su identidad, habría ordenado a los cadetes ingresar al mar agitado en la Playa Corona de Ensenada, pese a que existía una advertencia de bandera roja por registrarse olas que superaban los 4 metros de altura.

Y es que el director del Centro de Adiestramiento de la Guardia Nacional, ‘El Ciprés’, fue detenido por autoridades militares y enviado a un centro castrense en Tijuana, sin embargo, solo está acusado de desobediencia y abuso de autoridad.

¿Qué es una novatada? Lo que habría originado la tragedia en Baja California donde murieron 7 cadetes de la Guardia Nacional

Mueren 7 cadetes de la Guardia Nacional por novatada en Ensenada

El pasado 20 de febrero de 2024, durante una novatada, 7 cadetes de la Guardia Nacional murieron ahogados luego de ingresar al mar en la Playa Corona, en Ensenada, Baja California, con todo y su equipo táctico.

Familiares de las víctimas denunciaron que el mando desobedeció por completo las advertencias de las autoridades, quienes advirtieron que no se podía realizar ninguna actividad en el mar.

Esto debido a que las olas superaban los 4 metros de altura, situaciones climáticas adversas que afectarían incluso hasta el nadador más experto.

La graduación de los 7 cadetes estaba prevista para el sábado 2 de marzo, pero estos hechos se vieron empañados por las acciones cometidas por un mando militar.

Los cuerpos de los 7 reclutas ya fueron recuperados del mar, aunque varios días después hasta que las condiciones del clima así lo permitieron, por lo que serán entregados a sus familiares, quienes exigen justicia por estos hechos.