La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) exhortó a las aerolíneas Aeroméxico, Viva Aerobús y Volaris a detener el cobro indebido que hacen por el equipaje de mano.

En un comunicado, la Profeco exhortó a las aerolíneas a detener el cobro indebido por equipaje de mano o de lo contrario amenazó con emprender acciones legales.

Profeco ya había alertado a las aerolíneas

Según la Profeco, derivado de monitoreos realizados a las páginas de internet de dichas aerolíneas y comprobar que continúan cobrando el equipaje de mano se les hizo un llamado.

El 5 de noviembre, la Profeco solicitó a las aerolíneas detener las “prácticas abusivas” de comercializar vuelos con tarifas que no incluyen el derecho a transportar equipaje de mano.

Dado que las aerolíneas Aeroméxico, Viva Aerobús y Volaris establecen un cargo adicional por transportar un equipaje de mano.

El cobro indebido podría constituir una práctica que lesiona los intereses y los derechos de los consumidores, alertó la Profeco.

Profeco podría demandar a las aerolíneas

La Profeco señaló que, bajo el aparcamiento de las aerolíneas de no eliminar el cobro indebido por equipaje de mano, se emitiría una Alerta y se iniciarán procedimientos por infracciones a la ley.

Dado que el artículo 47 Bis de la Ley de Aviación Civil establece que los pasajeros podrán llevar en cabina hasta dos piezas de equipaje de mano.

Las dimensiones por equipaje serán de 55 centímetros de largo por 40 centímetros de ancho, por 25 cm de alto y el peso de ambas no deberá exceder los 10 kilogramos, recordó la Profeco.

El equipaje de mano es inherente a las aerolíneas, dice la Profeco

La Profeco señaló que el equipaje de mano se constituye como un elemento inherente al servicio de transporte aéreo, pues el pasajero requiere pertenencias mínimas para su lugar de destino.

Por ello, la decisión de transportar equipaje documentado recae en el pasajero, mientras que el equipaje de mano es inherente al servicio de las aerolíneas, consideró la Profeco.

Además, el cobro de equipaje de mano podría considerarse una acción abusiva, porque su cobro no está sujeto a negociación y es un servicio adicional indebido.