En un video en donde el sepulturero del PRD, Guadalupe Acosta Naranjo, aparece encarnado como el rostro de la derrota del otrora poderoso partido del Sol Azteca, el ex dirigente llama a lo que parecería ya un abierto golpe de Estado.

”Frente Cívico llama a tomar el Congreso y evitar la toma de posesión de Sheinbaum si se aprueban reformas sin el debido proceso”, así reprodujeron varios medios que simpatizan con la derecha este nuevo llamado a ignorar la voluntad popular, que dio a la presidenta electa Claudia Sheinbaum una aplastante victoria de más de 20 millones de votos por encima de Xóchitl Gálvez.

Mediante el membrete denominado “Frente Cívico Nacional”, Acosta Naranjo invitó a los trabajadores del Poder Judicial a marchar y, según él, si no se lleva a cabo el “debido proceso”, a tomar las instalaciones de San Lázaro para que Claudia Sheinbaum no tome protesta.

Si así se comporta la derecha con una victoria aplastante de decenas de millones de mexicanos que votamos a favor del Plan C, imaginen qué habría pasado en una elección más cerrada. Ya estarían exigiendo una invasión de los cascos azules de la ONU y de los Estados Unidos.

Puede parecer gracioso, o hasta anecdótico, ante la comprobada falta de carisma y de capacidad de convocatoria de Acosta.

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Pero la realidad es que ya se les está haciendo costumbre a los derechistas mexicanos el insinuar con algún tipo de golpe de Estado técnico o militar en cuanto las elecciones no los favorecen por su mediocridad cómo políticos y su ineptitud cómo dirigentes.

¿Es usted un golpista, dirigente fracasado y sepulturero del PRD, señor Acosta Naranjo?