Les platico:

A ver, santones de la I.P. que manejan al consejo de la UDEM, ¿qué chiste tiene ganarle a un apretado económicamente centro de desarrollo neuromotor infantil, el brete en que los metió Miguel Treviño, alcalde saliente -gracias a Dios- de San Pedro Garza García?

Es absurda esta pelea tan desigual, entre una universidad que cada año cobra de colegiaturas más de 4 mil millones de pesos y una organización que se sostiene a duras penas con donativos y benefactores?

Eso es inexplicable, pero más lo es que pudiendo haber invertido mucho menos que los $35 millones que la UDEM entregó como moche a Miguel Treviño para eliminar la cláusula que protegía al CINDE-III, prefirieron embarcarse en un berenjenal que pone en riesgo su prestigio.

¿Cuánto le puede costar a la UDEM construir un nuevo local para que el CINDE-III desaloje los dos predios que ocupa actualmente, donde la universidad quiere construir un parque?

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¿Cinco millones? ¿Seis? ¿Diez a lo mucho con todo y terreno?

Y en vez de eso están metidos ahora en una bronca por la que pagaron $35 millones para que el municipio eliminara la mentada cláusula, que se suman a los $25 millones que pagó por la compra del terreno que ocupa el CINDE-III.

A menos que una parte de esos $35 millones del moche, que no aparecen en ningún registro contable del ayuntamiento de SPGG, haya ido a parar a la bolsa de algún intermediario, dentro o fuera de la UDEM, lo más probable es que adentro de la institución.

A ver, consejeros de la UDEM, ¿no les da vergüenza estar arriesgando de esta manera el nombre de una institución que se dice humanista y que da muestras a todas luces, de una deshumanización rampante?

Y mientras todo esto sucede, Miguel Treviño anduvo esta semana esparciendo sus miserias en un evento organizado por el MIT y Harvard en Boston, a la que fueron invitados 20 alcaldes para que mostraran sus logros en los municipios que gobiernan.

Si los organizadores de tan magno evento supieran en las que anda metido Miguel y el mitote en que metió a la UDEM, seguramente se jalarían los pelos.

Cajón de Sartre:

  • Los directivos de la UDEM y sus respectivos consejeros, siguen sin acercarse a los dirigentes del CINDE-III.
  • Seguramente están creyendo que esto va a pasar, pero si se salen con la suya y siguen apabullando a una organización indefensa, pero no del todo, porque ya lograron un amparo, la van a pagar caro en donde más les duele: las inscripciones.
  • Que tengan ustedes un plácido domingo.