“¿Qué es un phonbie? Un ser humano que ha perdido su condición de persona tras ser infectado por un virus que toma el control de sus actos a través de los dispositivos móviles”. Esto dice el sitio de internet Bienestaryproteccioninfantil.es. El diario ABC, de Madrid, define al phonbie como un zombie tecnológico.
El problema, que no es menor, afecta sobre todo a los y las adolescentes. Pero también hay vejetes a quienes domina el celular. Lo admito: soy uno de ellos. He perdido productividad por estar todo el tiempo al pendiente de mi teléfono móvil. Y, tristemente, no pocos de mis amigos han dejado de invitarme a sus reuniones porque no participo en las conversaciones por asomarme cada 30 segundos al WhatsApp —e inclusive me pongo a intentar mejorar mis puntuaciones en ciertos videojuegos—.
Como lamentablemente caigo en la categoría del zombie tecnológico, reconozco de inmediato a alguien de mi secta. Vi un video de ayer de la presidenta electa Claudia Sheinbaum, quien tenía a su lado a una mujer de negocios, Altagracia Gómez, y a un político, Marcelo Ebrard. Con seriedad, la empresaria Gómez escuchaba atenta a la presidenta Sheinbaum, mientras que Ebrard estaba absolutamente metido en su teléfono celular. No actuó así por mala educación, sino por enfermedad: es un phonbie.
¿Qué hacía Marcelo Ebrard, próximo secretario de Economía, mientras la presidenta Sheinbaum hablaba? Probablemente respondía mensajes de WhatsApp, quizá jugaba al solitario o tal vez consultaba portales de internet noticiosos. Descarto que don Marcelo hubiera estado enajenándose el ánimo con perturbadores sitios web solo para adultos.
Si no logra superar tan feo vicio, Ebrard no será eficaz en el gabinete de Claudia Sheinbaum. Supongo que profesionales de la psiquiatría o la psicología podrían ayudarlo: urge que les consulte antes de que demuestre su incapacidad y perjudique al proyecto del segundo piso de la 4T.
Para colaborar con la primera mujer presidenta, sugiero que alguien de su equipo aplique un sencillo test a todas las personas de su equipo de trabajo:
¿Cada cuánto compruebas tu móvil para ver si hay novedades en tus redes sociales, en tu whatsapp, llamadas perdidas,…?
1. Hay días que ni enciendo el móvil.
2. Un par de veces al día.
3. De vez en cuando.
4. Cada vez que oigo un pitido o siento un zumbido…¡muchas veces!
5. ¡Jamás suelto el móvil!
Quien apruebe el examen, que se le mantenga en el cargo. Quien repruebe, a recibir tratamiento contra tan lamentable adicción.