Sin duda en nuestro país se ha logrado avanzar en materia de paridad de género. Eso hay que saber reconocerlo gracias a la lucha feminista de millones, pero también a las reformas en asuntos políticos que, desde hace tiempo, han abierto el abanico no sólo para salvaguardar y proteger los derechos de las mujeres, sino para garantizar su participación en espacios del poder público y legislativo.

Quizá este último periodo ha sido clave para reconocer un conjunto de leyes y reformas que, en nuestros días, juegan un papel preponderante en la toma de decisiones de la mujer. Entonces, ese factor es, hasta hoy en día, un esquema incluyente considerando los esfuerzos que se han realizado en distintas materias en la que existe paridad.

Y estas participaciones se han visto materializadas. Hoy en día los espacios tanto administrativos, como legislativos y de elección popular es común observar la capacidad que demuestran las acciones y labores de la mujer.

Al asumir esas responsabilidades nuestro país avanza en materia de paridad e igualdad de género. Es cierto que aún falta fortalecer los puntos en muchos aspectos que vulneran los derechos de las mujeres como la violencia y las descalificaciones. No obstante, ayuda mucho las acciones que se han promovido desde las políticas públicas del gobierno federal.

Asimismo, el buen ejemplo lo puso el gobernador de Zacatecas, David Monreal. Fue uno de esos casos que me llamaron poderosamente la atención, máxime por el objetivo de las acciones que se pusieron en marcha. Resulta que, en aquella entidad, la Secretaría del Trabajo en coordinación con la administración estatal propiciaron las condiciones adecuadas para que, un número importante de mujeres, tuviera acceso a entrevistas de acuerdo a los perfiles y así, tuviesen la oportunidad de obtener un empleo mientras que cientos de empresas nacionales, incluso internacionales evalúan las competencias.

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Honestamente tenía mucho que, a nivel nacional, no observaba una acción con alto sentido de responsabilidad social en la promoción y oferta de un número importante de espacios para que, cientos de mujeres de aquella entidad, no sólo mejoren su calidad de vida, sino tengan un punto de apoyo para demostrar su potencial y su capacidad para incorporarse a cualquier trabajo rompiendo prejuicios y paradigmas.

Eso se llama visión, pero también empatía. Por esa razón, la tarea que asumió David Monreal, gobernador de Zacatecas merece ser reconocida.

Nuestro país necesita noticias, aunque también darle el reconocimiento que merece la mujer al incorporarse a una política incluyente. Sin duda una gran experiencia para todos aquellos que vivieron de cerca esta acción que, por cierto, fue todo un éxito por la concurrencia.

Una feria estatal sólo para mujeres ¡Qué buena decisión!

Y mejor aun: estas acciones impactan positivamente no sólo como un mecanismo para desarrollar las habilidades laborales, sino para mejorar las actividades de desarrollo económico de Zacatecas que, sin duda, avanza a pasos agigantados, sobre todo con estos programas recientes que promueven la participación, pero que también atiende el llamado de atención hacia las mujeres con bases a sus necesidades.