La Hidra de Lerna es una temible serpiente de muchas cabezas; emergió de su guarida y se dirigió a Hércules, el hijo de Zeus. Pero Hércules sabía que si le cortaba una cabeza a la hidra, le volvería a crecer cualquier otra, por lo que le pidió a su sobrino Yolao que quemara de inmediato el muñón de su cuello impidiendo así que la cabeza de la bestia diabólica volviera a crecer. Una bestia de entrañas venenosas tiene la capacidad de regenerar a partes del cuerpo, sin duda es hazaña de la imaginación.
Las Hidras de México emergieron en 2006… Calderón se hizo presidente gracias a un fraude electoral. Por temor a la muchedumbre que protestaba, se deslizó y entró al recinto para recibir la banda presidencial por la puerta trasera. Quería evitar enfrentarse a los inconformes, no quiso arriesgarse a que le pasara lo mismo que a la Hidra de Lerna… él ganó “haiga sido como haiga sido”.
Calderón se deslizó sigiloso a su guarida nueva, Los Pinos. Solo personajes oscuros pudo encontrar a su paso. Nombró secretario de Seguridad Pública a Genaro García Luna; los dos se hicieron uno. Una hidra de dos cabezas. A los pocos días, con la intención de desviar la atención del pueblo, dio un discurso en el que declaró la guerra contra el narcotráfico.
Sin estrategia alguna sin nada, solo con la intención de que la gente olvidara el fraude y que los mexicanos lo creyesen invencible y poderoso, se lanzó con todo y contra todos; ciego, cobarde y mudo.
García Luna siendo una hidra más oscura, habilidosa y venenosa, con una cinta negra delineada y con su lengua tarda y viperina fue bien utilizada para amedrentar, amordazar, asfixiar. Encarcelar a inocentes, elaborar con la ayuda de otros seres rastreros montajes para demostrarle a la gente que su estrategia era exitosa.
Juntos, como un ser con dos cabezas atacaron sin planeación a los cárteles, utilizando todo su poder. Ellos, las Hidras de México alborotaron a todos los jefes del crimen organizado y sicarios. A unos les cortaron la cabeza, conscientes de que emergerían otras.
Las que dejaron multiplicarse, aparearse, fueron a las del cártel de Sinaloa que se hicieron dueños de ambicionadas plazas. La violencia creció. Miles de asesinatos de civiles, de sicarios, de jefes y cientos de miles de desaparecidos fue la consecuencia de esa guerra fallida iniciada por estas hidras.
Felipe Calderón Hinojosa dice no saber nada ahora ni antes a pesar de haber tenido juntas con su mano derecha Genaro García Luna. Lo dice desde su guarida española.
Millones de dólares se presume recibieron ambos. Agarraron a Genaro. Felipe se refugió en España. Desde allá declara, se deslinda de la otra hidra, quien leal o amenazado calló ante el jurado y jamás mencionó el nombre del exiliado.
Felipe Calderón niega que haya conocido a su mano derecha, a su colaborador más cercano; a la otra hidra. Le cortó la cabeza a García Luna, quemó el muñón para que no emergiera, para que no hablara... ¿o solo le cortó la lengua?