Sin mover un dedo para conseguirlo, integrantes de la oposición en calidad de espectadores de primera fila, aplauden a rabiar lo que puede elucubrarse como el inicio de la autodestrucción de Morena, que cuál bomba de tiempo pareciere estar destinada a explotar previo conteo final.

No ha sido derivado de los videos de Ricardo Anaya, ni de los tuitazos de los expresidentes Vicente Fox y Felipe Calderón, ni siquiera de los diarios de circulación nacional que son señalados por el actual régimen como “neoliberales”, ni por Brozo y Carlos Loret de Mola, que se ha llegado a este punto en el que Morena está propiciando su autodestrucción.

El Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), es decir, el partido fundado por el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), vive quizá su momento más álgido en sus 10 años de existencia derivado de las luchas de poder, de ambiciones, traiciones, y el fuego amigo, que se ha desatado al interior del partido pero que se proyecta hacia afuera siendo motivo de regocijo entre sus “adversarios”.

Si bien la disputa por la dirigencia nacional provocó fracturas y notorias divisiones el año pasado cuando finalmente el ex diputado Mario Delgado obtuvo la estafeta en sustitución de Alfonso Ramírez Cuellar, quien había quedado con la presidencia interina tras la salida de Yeidkol Polevnsky, lo que se vive en la actualidad no tiene parangón.

Venganzas personales, abuso de autoridad, persecuciones políticas, actos de prepotencia, de presunta corrupción, enriquecimiento ilícito, y cuentas escondidas en paraísos fiscales, son solo unos cuantos señalamientos que acumulan algunos de sus militantes siendo el fuego amigo en la mayoría de los casos el que ha prendido la mecha para el incendio que según se advierte, ni siquiera el propio López Obrador será capaz de extinguir.

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El Fiscal General de la República, Alejandro Gertz Manero, que había gozado de cierta reputación a lo largo de su trayectoria profesional, se encuentra envuelto en una serie de acusaciones que han puesto en entredicho su conducta.

El presidente Andrés Manuel López Obrador, quien hace tres años lo propuso para el cargo y más tarde lo definió como “un hombre íntegro, recto, e incorruptible”, todavía la mañana de este miércoles 8 de diciembre, lo describió como un hombre honesto al defenderlo ante las recientes publicaciones de El Universal, donde se menciona que la Unidad de Inteligencia Financiera tiene documentada la riqueza del fiscal Gertz Manero, quien entre 2013 y 2021 obtuvo recursos que le permitieron gastar 109 millones de pesos en la compra de vehículos de lujo y realizar transferencias bancarias a países como Estados Unidos y España.

De acuerdo con la UIF, que hoy encabeza Pablo Gómez, entre 2014 y 2015 se identificó la compra de “122 vehículos de lujo por 109 millones 755,399.30 pesos , en su mayoría Mercedes-Benz y destaca un Rolls-Royce”.

La UIF revela que entre 2013 y 2021, el fiscal recibió por medio de pagos electrónicos 38 millones 959,144.81 pesos. También se identificaron cheques interbancarios entre 2015 y 2021 por 34 millones 347,182 pesos y entre 2003 y 2021 retiros para manejo de efectivo por 737,529.50 pesos.

Nadie esperaba ver envuelto en polémicas de este tipo al titular de la institución del Estado mexicano que debe investigar y perseguir los delitos federales, algunos de los cuales por los que está siendo acusado.

La lista de fallas en el corto periodo de Gertz Manero es larga: su mala relación con el ex director de la Unidad de Inteligencia Financiera, Santiago Nieto, quizá sea el motivo de que paulatinamente hayan ido surgiendo señalamientos en su contra, aunado al problema familiar que enfrenta y por el que ya se ha presentado una solicitud de juicio político en su contra por parte de la familia de Laura Morán Servín, viuda de Federico Gertz Manero, que en una primera instancia había pedido a la Unidad de Inteligencia Financiera indagara depósitos presuntamente ilícitos en paraísos fiscales, por 7.9 millones de dólares.

En el caso del ex funcionario del gobierno federal, Santiago Nieto Castillo, quien esta misma semana fue expuesto por el diario Reforma, en el sentido de que en los últimos tres años habría acumulado bienes inmuebles y un auto por una cifra que ronda los 40 millones de pesos, hay que decir se presume enriquecimiento ilícito, pues de se antoja difícil pueda acreditar que ha actuado en el marco de la legalidad siendo no pocos los elementos cuestionables en torno a las operaciones que habría llevado a cabo para la adquisición de dicha fortuna, y que pretende cubrir con argumentos fútiles.

Al respecto, el extitular de la Unidad de Inteligencia Financiera señaló que aumentaron sus deudas, más no su patrimonio, pero es bien sabido que para adquirir deuda se requiere tener no solamente un patrimonio que garantice los empréstitos sino además se requiere comprobarle a quien va a realizar el financiamiento que existe la capacidad de flujo, es decir, el ingreso y el balance adecuado entre el egreso que tenga la persona física o moral que va a adquirir un crédito para efecto de poder sufragar las amortizaciones mensuales que por concepto de aportación al capital y sobre todo al interés que cualquier empréstito produce deba pagar el acreditado.

Lo anterior se pudo conocer gracias a que el pasado jueves 2 de diciembre fue presentada ante la Fiscalía General de la República una denuncia anónima sobre el presunto enriquecimiento ilícito de Nieto, siendo que resulta extraño tam rápido incremento de su riqueza toda vez que su salario en un año era de un poco más de un millón de pesos. Según trasciende, el fuego amigo le llegó a Nieto desde la propia FGR derivado de las rencillas con el Fiscal.

Mientras tanto en otro frente; los aspirantes a la sucesión presidencial, el canciller Marcelo Ebrard y la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, se mantienen enfrascados en la disputa por ser los favoritos del presidente en espera de conseguir su bendición para ser el abanderado o abanderada por Morena para el 2024, aunque en ese camino a la autodestrucción que ya se advierte al interior de dicho instituto político, donde además Yeidkol Polevnsky, Mario Delgado y Ricardo Monreal, enfrentan sus propios demonios sin menoscabo de lo que la chiquillada pueda abonar a la situación, no sabemos si para el 2024 todavía haya un partido qué representar.

Salvador Cosio Gaona en Twitter: @salvadorcosio1