Hace unos días Andrés Conesa sostuvo una charla con sus trabajadores a través de MS Teams, que llevó por nombre “¡Hoy es nuestro Town Hall!”, y en ella el director de la aerolínea reveló que habrá un “Nuevo Aeroméxico”.
Hace algunos meses especulamos hacia dónde gravitaría la aerolínea del Caballero Águila; bien podría ser a un modelo híbrido -mezcla de línea aérea tradicional con una de bajo costo-, o que se quedaría como lo que siempre ha sido, motivo por el que sus clientes la prefieren, o sea una aerolínea tradicional.
El primer paso era salir del proceso legal llamado coloquialmente “Capítulo 11″ en los Estados Unidos, para tener más claro qué rumbo tomaría Aeroméxico, y déjenme decirles que lo dicho en esa plática con los trabajadores es sumamente revelador.
Pongamos el contexto. Conesa se remontó a lo vivido 12 años atrás, cuando la influenza provocada por el virus AH1N1 había hecho fuertes estragos en la aerolínea, dejándola en número rojos. Sin embargo, dijo, la gran diferencia con la pandemia actual, es que Aeroméxico está saliendo fortalecida. Explicó que se reestructuró la aerolínea durante dos años, y que sin la presencia de la pandemia, estos cambios hubieran tardado entre doce o quince años en suceder; que gracias a la crisis sanitara se aprovechó para acelerar los cambios conducentes.
Ante los trabajadores admitió la importancia de que la aerolínea nunca dejó de volar, y que el peor día fue a finales de abril del 2020, pues normalmente las operaciones pre pandemia rondaban los 700 vuelos, y que en esa ocasión solo se tuvieron 12 operaciones, el punto más crítico que nunca antes había tenido la aerolínea del Caballero Águila.
Conesa aprovechó el espacio para informarles a sus trabajadores que se ha estado invirtiendo en la adquisición de nueva flota, así como compra de nueva tecnología e infraestructura, por un monto cercano a los cinco mil millones de dólares, a partir de ahora y hasta el 2025, por lo que la aerolínea se encuentra trabajando en consolidar su posición en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM). Es por ello que mandaron las operaciones de la filial a la Terminal 1, quedándose la troncal en la Terminal 2.
A pesar de la crisis, dijo a los trabajadores, la parte positiva fue que los más débiles “salen y dejan de volar”. Es correcto, Andrés Conesa hizo referencia a la salida de Interjet del mercado -la aerolínea que le estaba pisando los talones a Aeroméxico-, y celebró que en horas pico se dejaron lo números de tener el 40% o 42% de las operaciones, para manejar el 60% de las operaciones en el AICM.
Puntualizó que tras lograr la consolidación de la compañía aérea, vienen más retos que cumplir, empezando por el mercado doméstico, además de invertir lo necesario para “diferenciarse” del resto de las aerolíneas nacionales, cuyo modelo es el bajo costo, y demostrar que son la mejor aerolínea de modelo tradicional, no solo del país sino de América Latina. Hasta el momento la recuperación alcanza el 80% de sus operaciones, a pesar del alza del combustible.
Dijo que comparte con sus trabajadores la alegría por regresar a Londres después de los dos años que por la pandemia se vieron obligados a cerrar la ruta. Sin embargo en el caso de otros vuelos de largo alcance como es el caso de Narita, no se ha podido reestablecer la ruta, esto porque los mexicanos todavía no pueden entrar a Japón.
No omitió señalar que el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania ha derivado en el alza de los combustibles, y que otro reto al que se tiene que enfrentar Aeroméxico es al cierre del espacio aéreo, y la consecuente suspensión de la ruta a Corea del Sur.
Y expresó que en el mercado norteamericano están esperando el regreso a la Categoría 1, para comenzar a expandir el mercado que se ha dejado un poco descuidado por las restricciones que se tienen al estar en Categoría 2. Conesa dijo que el gobierno, de la mano con las autoridades aeronáuticas tanto nacionales como extranjeras y la propia aerolínea han estado coadyuvando para que este retorno a la Categoría 1 suceda a más tardar en el mes de agosto y aprovechar la segunda temporada alta del año.
En efecto estimados lectores y usuarios de las líneas áreas, Aeroméxico tiene trazado un plan en el cual busca que el pasajero lo identifique como una aerolínea sólida, con cartera de vuelos hacia tres continentes: el Americano -al volar a Estados Unidos y Canadá, Centro y Sudamérica-, a Europa con varios vuelos diferentes capitales del viejo continente, y por último al continente asiático, a donde por el momento, por diversos motivos, se ha dejado de tener operaciones aeronáuticas.
Esperemos que el servicio a sus clientes mejore, que la comunicación sea más ágil, sobre todo en tiempo de temporada alta, donde las demoras y cancelaciones de vuelo son el pan nuestro de cada día. Deseamos que sigan en la línea de ser una aerolínea tradicional y no pretendan competir con el mercado de bajo costo. Hay mercado para todos.
Y así es como Andrés Conesa habla de la “Nueva Aeroméxico”. Sin lugar a duda será un reto gigantesco, sobre todo con una administración y repartición accionaria que dista mucho de la “antigua” Aeroméxico. Estaremos al pendiente de lo que suceda y deje de suceder en la llamada Aerolínea “Bandera” de nuestro país.