Nada personal contra el beis, pero ayuda poco…

Al menos en las notas que leí en internet antes de redactar este artículo no se recomienda al beisbol entre los principales deportes para ayudar a las personas con problemas cardiacos —es el caso del presidente de México—, con diabetes o con tendencia a la obesidad (mi caso).

¿Cuáles son los mejor ejercicios para el corazón? Lo pregunté en internet y encontré lo siguiente:

√ Caminar.

√ Nadar.

√ Trotar suavemente.

Las columnas más leídas de hoy

√ Andar en bicicleta.

√ Zumba, aerobic u otras actividades en las que el baile sea protagonista.

√ Deportes con raqueta como pádel, squash o bádminton.

√ Esquí.

¿Qué ejercicio puede hacer Andrés Manuel?

√ ¿Caminar? Sí, sin duda: sobra espacio en las instalaciones de Palacio Nacional para que el presidente camine una o varias horas al día, incluso combinando esta actividad con su trabajo. Es decir, mientras pasea por los jardines de la sede de la presidencia puede tener reuniones con una sola persona —con dos o más no sería posible mantener la concentración—.

¿Nadar? No sé si a Andrés Manuel le guste tal actividad o si sepa practicarla en la forma que se requiere para realmente ejercitarse —yo no sé hacerlo de la manera correcta, por cierto—.

¿Trotar? A mí me aburre y siento que no beneficia a mis rodillas, debilitadas por el paso de los años.

√ ¿Brincotear en un gimnasio? No me imagino al presidente de México en tal actividad.

√ ¿Tomar la raqueta? Si no se ha hecho toda la vida, no vale la pena empezar después de los sesenta.

√ ¿Esquí? Imposible en México, donde tenemos montañas pero no nieve. Además pienso que se trata de una actividad peligrosa si no se ha practicado durante años, como es el caso de Andrés Manuel. El esquí acuático sí se practica en nuestro país, pero no veo a AMLO en eso.

√ ¿Bicicleta? La mejor opción, sobre todo si el ejercicio se realiza en bici eléctrica. Es muy sencillo dominarla, muy divertido y se puede hacer todo el deporte que se quiera. La recomiendo a Andrés Manuel.

Ventajas y desventajas de la bici eléctrica

Para explicarlas he consultado dos sitios de internet, estos:

https://www.carmelabikes.com/ventajas-desventajas-ir-en-bicicleta-electrica/

https://blog.terranea.es/ventajas-problemas-bicicleta-electrica/

√ Aptas para cualquier edad y condición física: En las bicicletas eléctricas no representa ningún problema regular el esfuerzo. Si hay suficiente condición o ganas, hasta se puede desconectar el motor para pedalear en serio.

No contaminan: como medio de transporte es una forma limpia de acudir al trabajo. Importantísimo el ejemplo que Andrés Manuel podría dar en recorridos ciclistas por las distintas ciudades mexicanas que visita. Ahora lo hace en camioneta, puede en ciertos tramos y con la vigilancia adecuada por parte del ejército podría moverse en bici eléctrica, tan eficaz como el coche o la motocicleta. Estas bicicletas con motor ya son, en no pocos países, una opción a los automóviles, sobre todo en traslados relativamente cortos: digamos de menos de 20 kilómetros, que se pueden realizar sin llegar al agotamiento cuando mucho en unos 40 minutos.

√ Las ciudades están cada vez más adaptadas para las bicicletas, pero todavía no lo suficiente. En todas partes empiezan a aparecer carriles exclusivos para ciclistas, y qué bueno. Desde luego, se necesitan muchos más. Solo con una verdadera invasión de ciclistas en las calles, los automovilistas se educarán y aprenderán a respetarlos. Y los alcaldes, si ellos mismos se suben a la bici, entenderán la necesidad de tapar baches y reparar alcantarillas, dos de los más grandes enemigos del ciclista.

√ Son más seguras que las motos. Más seguras para el usuario de las bicicletas eléctricas, sin duda, pero también para los automovilistas y los peatones. Para empezar porque el ciclista no podrá recorrer las calles a más de cien kilómetros por hora, lo que desgraciadamente sí hacen no pocos motociclistas irresponsables o soñadores.

No requiere un mantenimiento costoso. Una revisión anual —mucho más barata que llevar el coche o la moto al taller— puede ser suficiente para mantener en buen estado la bici eléctrica. La batería dura en condiciones aceptables hasta una década.

√ En ciertas horas, más rápida que el automóvil. Sin jugar al exceso de velocidad —imposible en bici—, durante las horas de mayor tráfico el ciclista llegará a su destino antes que el automovilista.

√ La maravilla de dominar la montaña. En la bicicleta no eléctrica solo los ciclistas perfectamente entrenados pueden con las cuestas. Con la bici eléctrica cualquiera puede hacerlo. No es poca cosa. La alegría de subir es, en más de un sentido, insuperable. Desde luego, para conseguirlo hay que pedalear: no se mueven solos los pedales. El motor solo responde si lo ayudamos, pero de esto se trata para que el ejercicio valga la pena.

√ Es un ejercicio físico extraordinario y se puede realizar a cualquier edad. En la bicicleta eléctrica por ningún motivo se realiza el mismo ejercicio que en la estándar, pero no hay duda de que se hace un excelente ejercicio si se pedalea en forma constante con la ayuda del motor, sobre todo cuesta arriba. No es obligatorio pasear sin esforzarse, por supuesto que no. La idea es moverse hasta donde el cuerpo aguante. Si el cansancio aparece se puede disminuir el pedaleo todo lo que haga falta para recuperar el aliento.

√ No es costoso cargar la batería. Casi se diría que es gratis si se compara con lo que se paga por llenar de gasolina el tanque del coche.

√ No pagan impuestos (y espero no dar malas ideas a las tesorerías estatales o al SAT). A diferencia de los automóviles, no se pagan impuestos por adquirir las bicis eléctricas ni es necesario dejar dinero en las oficinas públicas para registradas y contar con placas. Tampoco se requiere comprar un seguro de accidentes: el ciclista, por la velocidad reducida a la que se mueve en una ciudad, no dañará a ninguna persona que respete los carriles exclusivos para las bicis.

√ Se ahorra en estacionamientos. Con un buen candado, la bici se puede dejar en cualquier parte con la seguridad de que ni va a estorbar ni se la van a robar. Así que su uso no exige ni pagar parquímetros ni pensiones en estacionamientos.

La lluvia y las papadas

Si llueve, el ciclista tiene dos opciones: (i) pedalear bien abrigado y con mucho cuidado en los charcos, algo que la gente más experta puede realizar sin mayor problema, y (ii) no pedalear. Eso sí, después de andar en la bici eléctrica en la lluvia, será conveniente secar la batería y algunas otras piezas.

√ La batería. Cuando se deseche, deberá hacerse con cuidado. No es adecuado tirarla sin más a la basura. Las ciudades tendrán que ofrecer cada día más opciones para que ello se haga de la manera menos contaminante posible.

√ Bicis pesadas. El mayor inconveniente que veo a las bicis eléctricas es su peso, más o menos 24 kilogramos. No cualquiera puede cargarlas para entrar o salir de edificios sin rampas o elevadores.

√ Una Ventaja para el gabinete presidencial. Si Andrés Manuel impone la moda de pasear en bicicleta eléctrica, los integrantes del gabinete se convertirán en ciclistas apasionados. Algunos y algunas hasta perderán esas papadas merecedoras de estar en el Guinness World Records y que en nada les favorecen cuando, por ejemplo, anuncian en las mañaneras los aciertos de México en política exterior.