Jeanne Louise Calment, fue una mujer francesa que se hizo famosa por haber vivido más de 122 años y hasta su muerte en 1997 fue un referente para el buen estilo de vida de las mujeres, era común que la gente y los medios le preguntaran sus secretos para la longevidad y ella aseguraba que todo estaba en andar en bicicleta hasta los 100 años, casarse con alguien que pagará las cuentas; comer dos libras de chocolate por semana; frotar el aceite de oliva sobre la piel y beber una copa de vino de vez en cuando . Pero ahora todo lo anterior está en entredicho pues existe una teoría que apunta a que Calment mintió sobre su edad.
En días pasados, el investigador Nikolay Zak del Centro de Moscú para la Educación Matemática Continua, publicó en ResearchGate, un sitio de redes sociales para investigadores, un artículo titulado "Jeanne Calment: el secreto de la longevidad". En el documento se postula que la longeva mujer no era realmente Jeanne, sino su hija Yvonne.
Aunque el documento aún no ha sido revisado por otros investigadores, la sospecha se ha levantado ya.
Según se informa, Yvonne habría muerto de neumonía en 1934, dejando atrás a su esposo e hijo. Pero Zak teoriza que en realidad fue Jeanne quien murió en 1934, a los 99 años de edad y que Yvonne, su hija, asumió la identidad de Jeanne para evitar el pago de los impuestos sobre el derecho de sucesión.
Algunas de las pruebas que Zak presenta es que en las fotos en las que la madre y la hija aparecen juntas, son bastante diferentes, pero en las fotos tomadas a Janne tras la supuesta muerte de Yvonne, la primera es muy similar a la segunda. Zak también señala que cuando Yvonne falleció, dejó a su esposo de 42 años, Joseph Charles Frédéric Billot quien nunca se volvió a casar; sin embargo, se mudó con Jeanne y los dos criaron a su hijo juntos.Según la teoría Billot podría haberse llevado tan bien con su suegra porque en realidad era su esposa Yvonne.
Entre los 17 elementos que presenta el investigador figura una copia del documento de identidad de Jeanne Calment que data de los años 1930 donde el color de sus ojos (negros), su estatura (1.52 metros) y la forma de su frente (parte inferior) no corresponden a aquellas características de la decana francesa durante los últimos años de vida.
Jean-Marie Robine, coautora de la biografía de Jeanne, declaró a Le Parisien que "la teoría es completamente inestable y no se basa en nada", y agregó que en distintas ocasiones se han cuestionado la validez del estatus de "supercentenario" de Jeanne Calment, pero no han proporcionado pruebas científicas suficientes.
Con información de AFP.