Una de las noticias que nos dejó con la boca abierta y que ha generado miles de memes que parecen no tener fin, es el supuesto robo del líquido de las rodillas por parte del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) a pacientes con síntomas de Covid-19.

Y sí, para nosotros y la mayoría podrá resultarnos ilógico e incluso de lo más gracioso. Sin embargo, los psicólogos se vieron forzados a explicar por qué algunas personas prefieren adoptar teorías conspiratorias del coronavirus, lejos de aceptar la realidad.

El líquido de las rodillas y por qué la gente cree en teorías conspiratorias

Bueno, pues empecemos al ritmo en que nos divertimos con los distintos memes del tema.

Algunas de las teorías que han surgido son: las relacionadas con la tecnología móvil 5G, las que afirman que Bill Gates está detrás de todo, la del líquido de las rodillas que asevera que a los pacientes se les mata con una inyección letal, además de la que asegura que el virus salió de un laboratorio.

De hecho, según una encuesta reciente del Centro de Investigación Pew, ubicado en Washington, reveló que el 29 por ciento de los estadounidenses piensa que el coronavirus sí surgió de un laboratorio. Pero esto tiene una explicación bastante congruente para los especialistas en salud mental.

Una investigación realizada Andreas Goreis y Martin Voracek, ambos psicólogos de la Universidad de Viena, en Austria, las teorías de conspiración prosperan en medio de una crisis y son típicamente provocadas por la ansiedad. Ello, porque la gente tiene miedo y no puede controlar lo que ocurre, estas provienen del deseo de dar sentido a las circunstancias.

Así que entonces, su objetivo es permitir a las personas preservar sus propias creencias en tiempos inciertos, según se lee en el artículo publicado en Fronteras de la Psicología. Por otra parte, y especialmente en relación con el tema del Covid-19, Karen Douglas, psicóloga de la Universidad de Kent, aclara:

"Este es un gran evento que requiere grandes explicaciones. En una época de gran confusión, no es sorprendente que la gente quiera respuestas, aunque eso signifique conectar los puntos incorrectamente. Quitarle importancia al virus es una forma de intentar hacer frente a la amenaza existencial inmediata, pero también sirve para que los individuos puedan seguir adelante".