Movimiento Ciudadano jugará un rol clave en el próximo proceso electoral en todo el país, más allá de las fricciones internas y las confrontaciones que produce el efecto de sus determinaciones a futuro. De hecho, la mala idea o la estrategia errónea de haber pactado con la derecha en las elecciones del 2018, provocaron un descenso en la intención del voto. Incluso, el propio Dante Delgado, líder nacional de MC, ha sacado sus propias conclusiones y, para el ejercicio que viene, perderían más si constituyen una alianza con el Frente Amplio por México.

Y, a como están las cosas de cantadas, MC sabe perfectamente que el proceso “democrático” del Frente es una simulación. Incluso, el propio Alejandro Moreno, presidente nacional del PRI, dobló las manos y, en conferencia de prensa, dijo que a su candidata no le favorecen las encuestas. Con ello, se fortalecen los rumores que, desde hace unas semanas, abordamos en este espacio de opinión. Debido a que el Revolucionario Institucional eligió candidatos en Coahuila y Estado de México, agotó el margen de negociación. O sea, el método fue todo una fabricación para llamar la atención; todos sabemos que Xóchitl Gálvez será la candidata de la derecha.

Más tarde seremos testigos de ese hecho cuando las dirigencias anuncien su candidatura oficial en unos días. Por ese motivo, la senadora ha estado insistiendo en sumar a Movimiento Ciudadano. Quiso presionar a través del gobernador de Jalisco; asimismo, lanza elogios para intentar persuadir a la militancia de MC. Eso es solo una fachada, hasta cierto punto curiosa, pues sabemos que, en este momento, el partido naranja irá solo en las elecciones presidenciales del 2024. Con mucha frecuencia, su dirigente nacional ha lanzado el mensaje en una señal clara que, la única opción que tienen en mente, es buscar un candidato emanado de sus propios cuadros.

Veo, por ejemplo, algunos anuncios y publicidad que hacen alusión a ese hecho. Movimiento Ciudadano ha salido a presumir el crecimiento acelerado que han tenido en los últimos meses. Saben que, con ese paso, muy pronto pueden consolidar un proyecto que sea altamente competitivo a futuro. El balance, claro está, hay alianzas que suman y, bajo ese efecto, otras que restan. Indudablemente, el pacto que llevaron a cabo en 2018, lo hizo caer en decadencia, incluyendo en señalamientos como una fuerza de derecha.

Dante Delgado es muy político muy hábil; sabrá aguantar la enorme presión no solo del Frente por México, sino de los grupos conservadores que, no hay duda de ello, le meterán muchos recursos a la campaña. Hablo de los detractores del presidente López Obrador. Y con ese panorama altamente polarizado, Movimiento Ciudadano puede capitalizar votos. Como sabemos, hay quienes no simpatizan con Morena, pero tampoco con el Frente. En todo caso, eso le conviene más a Dante en una eventual fragmentación del voto. Esa, como otras estrategias, es la apuesta de MC, más allá de la presión que salga, como la del gobernador constitucional de Jalisco.

Aun así, está muy clara la ruta de Movimiento Ciudadano, más allá del costo político de cualquier posible fractura que, dicho sea de paso, muy a menudo suceden en vísperas de tomar decisiones importantes, pues MC tiene mucho que ganar si va solo, y mucho que perder si va en alianza. Eso lo comprobaron en la pasada elección que firmaron una alianza con el PAN y PRD, que, por si fuese poco, han quedado prácticamente en la orfandad. Después de todo la derecha no tienen nada que ofrecer; están en franca decadencia y, lo peor, son blanco de señalamientos por la poca credibilidad de sus dirigentes.

Movimiento Ciudadano va solo, es un hecho.

Notas finales

El próximo jueves se define la próxima Mesa Directiva del Senado de la República, que deberá presidir Morena, por el último año de la LV Legislatura.

Corresponde a una mujer encabezarla, por lo cual los senadores de Morena iniciarán la votación, en urnas transparentes, desde las 9 de la mañana, cuando inicie su reunión plenaria, en la antigua casona de Xicoténcatl.

Por la tarde, en el salón del pleno, los senadores de todos los partidos políticos tendrán una sesión en la que elegirán a la Mesa Directiva y se instalará.

Las senadoras que han levantado la mano para presidir la Mesa Directiva son: Bertha Caraveo, Cecilia Sánchez, Ana Lilia Rivera y Freyda Marivel Villegas.

En honor a la verdad, quienes más méritos tienen son Freyda Maribel Villegas y Ana Lilia Rivera, las otras dos son ocurrencia de Marcelo Ebrard, más para medir fuerzas, que para que dirijan la Mesa Directiva.

Freyda Maribel cuenta con el apoyo de un gran número de senadores, además de que en tres ocasiones el partido le ha pedido que se espere, cuando regresó Olga Sánchez Cordero, fue la primera, cuando aspiraba a la gubernatura, también le pidieron que se hiciera a un lado y a cambio le darían la Secretaría General de Gobierno, y una vez más la hicieron a un lado.

Es de justicia que ahora le cumplan, por su buen trabajo legislativo y por su lealtad al partido.

Aún no hay claridad sobre quiénes serán los vicepresidentes y los secretarios, en los que participan los demás grupos parlamentarios, aunque ya se apuntaron Sergio Pérez y Casimiro Méndez, para las vicepresidencias.